
Ahora bien, hoy terminé de ver la media película que me faltaba. Se trata de Alatriste (Agustín Díaz Yanes, 2006). Había visto en Libélula el librito estilo comic, y sentí envidia por el ilustrador, no por sus trazos sino por haber dibujado algo tan largo. Yo quiero también.
De la película me queda el buen sabor y la satisfacción de haber tenido ante mis ojos algo tan parecido a los cuadros de Hervel; el trato dado a la fotografía, el claroscuro, hacen de una pieza de entretenimiento una cascada de lienzos. En fin, muy bonito todo, muy entretenido.
De lo poco que pude pescar –en palabras, digo- está la siguiente frase, y con esto termino.
De la película me queda el buen sabor y la satisfacción de haber tenido ante mis ojos algo tan parecido a los cuadros de Hervel; el trato dado a la fotografía, el claroscuro, hacen de una pieza de entretenimiento una cascada de lienzos. En fin, muy bonito todo, muy entretenido.
De lo poco que pude pescar –en palabras, digo- está la siguiente frase, y con esto termino.
"La traición es una mancha que nunca envejece. Judas se ahorcó, pero yo no tengo el valor, por eso lloro..."
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